Mientras que las ciudades están cada vez más habitadas, y son más grandes, las viviendas en las que vivimos son cada vez más pequeñas. Tener un espacio exterior que amplíe el espacio habitable de nuestra casa es un casi un sueño muchos que no entienden como todavía hay gente que no aprovecha sus jardines, balcones o terrazas.
Hoy os mostramos la increíble transformación de un patio. Un espacio en desuso y sin vida ha pasado a convertirse en un hermoso lugar para disfrutar del ocio y de entrañables comilonas. Sin más dilación nos vamos rumbo a Sicilia y os dejamos en manos del arquitecto italiano Ignazio Buscio encargado de esta metamorfosis.
Estamos en el patio de la casa antes de comenzar las obras. La primera idea de sus propietarios fue convertirlo en un jardín pero al final decidieron cubrir el suelo con cemento. A excepción de un par de plantas y una pérgola ya oxidada, el amplio espacio está vacío.
¡El patio es irreconocible! Tras la reforma podemos comprobar lo que una distribución estudiada puede hacer con los espacios. Al fondo se ha colocado la zona de estar, con varias butacas y una mesa auxiliar en el centro. El perímetro de la vivienda ha sido limitado por un muro blanco que ayudará a ampliar la luz del lugar y dar una sensación de limpieza y orden.
Echamos ahora un rápido vistazo a la parte trasera del patio para comprobar que no es muy distinta de la frontal.
El suelo y las paredes se encuentran el mal estado y la extensión que vemos al fondo no parece una construcción muy segura.
Como vemos en la fotografía, la fachada de la vivienda también ha sido renovada y ahora, el dormitorio principal se sitúa al otro lado de este muro. La habitación cuenta con un rincón de lectura al aire libre, un espacio completamente nuevo en el que relajarse disfrutando de la brisa.
La madera ha sido el material elegido para combinar con el blanco de los muros, una sencilla butaca y un pequeño árbol completan la escena.
Volvemos a la parte frontal previa reforma. Al igual que el resto del patio, esta zona no estaba bien aprovechada. Sus propietarios la utilizaban como área de aparcamiento y aparte de los coches unas cuantas macetas eran los únicos elementos que intentaban decorar el espacio. Pasemos a la siguiente fotografía y veamos el nuevo espacio:
Las macetas desaparecen para dar paso a jardines a ambos lados de un sendero que nos lleva hasta la zona de estar y la cocina. Una pequeña pared de madera añade un toque de intimidad al salón al aire libre y el material elegido para el camino convierte a esta en una entrada perfecta para un patio de diseño actual.
El nuevo patio es impresionante. Para completar la estancia, vemos como al fondo se ha instalado una cocina de exterior a la que no le falta de nada. Bajo la superficie de trabajo hay espacio de almacenamiento extra perfecto para guardar todos los utensilios. Cuando cae la noche, el lugar se iluminará gracias a un nuevo sistema de iluminación añadido durante la renovación.