Una casa mediterránea ¡en todo su esplendor!

Joelia Dávila Joelia Dávila
PORTICUS. Érase una vivienda a un porche pegada., Chiarri arquitectura Chiarri arquitectura منازل
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Sus creadores la definen así: Érase una vivienda a un porche pegada, pues, como lo explican ellos mismos y como la historia lo dice, la arquitectura residencial mediterránea gira en torno a los porches, pórticos, patios, emparrados, cobertizos o naias: un espacio cubierto y abierto, el espacio clave y central, en donde todo pasa y donde transcurre gran parte de la vida cotidiana en esta zona del litoral mediterráneo.

Con base en la cultura de cada región, la arquitectura debe responder a la forma de vida de sus habitantes, y es en este sentido que Chiarri Arquitectura, de Valencia, España, ha proyectado y construido la Casa Porticus, una vivienda que enaltece el espacio del porche o pórtico, primordial e indispensable, organizando los espacios alrededor del mismo, haciendo de él el punto de partida, el parteaguas de la vivienda completa.

El terreno, una amplia parcela ubicada a cierta altura del terreno regular, ofrece una increíble vista hacia el sureste, alcanzando a vislumbrar parte de la ciudad y el mar. La brisa marina complementa el cuadro, irradiando su frescura a lo largo y ancho del porche y ventilando los interiores de lado a lado. Así mismo y para complementar la integración de la arquitectura al entorno, los materiales utilizados fueron en su mayoría piedras, metales, maderas, termoarcilla y revestimientos de cal, entre otros.

La distribución es parte interesante del proyecto, la iluminación, las texturas y la transparencia de los muros, pero… ¿qué tal si pasamos a conocerla?

Una parcela bien delimitada

La vivienda ocupa la parcela de tal forma que hace un recorrido a lo largo de ella. A espaldas de la barda de piedra se encuentra el área privada de los dormitorios, de un nivel. El acceso peatonal lleva al vestíbulo principal, que es el parteaguas de la construcción completa. Desde esta vista no se aprecia mucho la belleza de la construcción, pues la parte interesante se encuentra más adentro, al otro lado del pórtico.

Maravilla de piedra

El porche, ¡el protagonista de la casa! Esta imagen muestra una parte del gran porche central, el elemento principal de casa. Éste mira hacia el sureste, manteniendo el control del asoleamiento por medio de las cubiertas y juegos de volúmenes. Es un espacio sencillo pero que cuenta con lo necesario para la vida cotidiana al aire libre: sala, comedor, piscina, áreas verdes, áreas de estar… El color blanco de ciertos muros conjuga cadenciosamente la textura de la piedra arenisca de los muros altos con el concreto de los aleros y el cristal de los ventanales. ¡Una deliciosa estancia!

Vértice: el vestíbulo central

El vestíbulo es el punto de unión entre los dos volúmenes principales: el área privada de las habitaciones y el área social. Es un espacio a doble altura rodeado de grandes ventanales que distribuye hacia las estancias y que invita a salir de nuevo hacia el porche.

La elegancia de sus acabados, el acero, la piedra pulida del piso, el revestimiento encalado, la piedra arenisca y la madera del cielo se suman a la luminosidad que penetra por los ventanales, haciendo de éste ¡un espacio encantador!

Estancias sucedidas

Los espacios interiores se suceden a lo largo de la doble altura y de la vista al exterior. La cocina, el comedor, la estancia y, de nuevo, el porche. De nueva cuenta, los colores, texturas y materiales crean un ambiente de perfecta calidez y delicada elegancia.

Cocina perfecta

La cocina es una moderna estancia de muebles lineales, de formas puras y en color blanco, resaltando sobre el piso de piedra gris. El toque de color se da por medio del muro frontal en color vino. El desayunador no es menos importante y cuenta también con una amplia y deliciosa vista a uno de los espacios del porche.

Baño matrimonial

El baño matrimonial es una delicia: elegante, de mármol y cristal. La madera le da un toque cálido a tanta frescura y, siguiendo la regla de oro de la casa, el baño tiene su propia vista al patio… una extensión de espacios, de ambientes, de sensaciones…

¡Delicia al atardecer!

Al atardecer, la vista es espectacular. La sutil iluminación de los cielos, el brillo que proyectan los interiores hacia afuera, la fosforescencia de la piscina a media tarde explica, sin palabras, por qué la vida en el litoral mediterráneo se da casi completamente en los pórticos, al aire libre, integrando el exterior con el interior, cubriendo y protegiendo, abriendo y ventilando, creando atmósferas de luz y paz, provocando sensaciones, ¡generando vida!

Una casa en Valencia, un pórtico como punto de partida, una vivienda a un porche pegada, esto y más es Porticus: elegancia, confort, estilo, brisa marina, ¡sorpresa!

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